Tu derecho a ser puta

Tu derecho a ser puta

Tu derecho a ser puta

Está bien ser puta, siempre y cuando lo haga por tu cuenta.

El objetivo del esfuerzo del Gobierno para combatir la trata de personas no es liberar a las prostitutas de su trabajo y ofrecerles una fuente de empleo digna. Simplemente persigue al proxeneta.

Hay tres responsables de esta degradación en la prostitución. El proxeneta, la prostituta y el cliente, por orden de gradación. Los tres son responsables.

El Consejo de Ministros ha aprobado un decreto que brinda asistencia a las víctimas de la trata, especialmente a las mujeres que han sido encarceladas para trabajar como prostitutas.

No obstante, doña Irene Montero no será la encargada de evaluar el desempeño de las mujeres meretrices. Es necesario que lo haga, ya que la prostitución desaparecería si no hubiera prostitutas.

Claro que es necesario perseguir al desafortunado del chulo, sin embargo, no se puede elogiar la venta de uno mismo por dinero. Sea motu proprio o bajo la vigilancia y explotación de un proxeneta.

En última instancia, la única persona que se opuso y no logró evitar la prostitución fue Ana Botella durante su mandato como alcaldesa de Madrid. Ofrecía a las prostitutas protección, ayuda en la búsqueda de trabajo y repatriación si eran extranjeras. Cuando demostró que lo más lamentable de la prostitución es que muchas putas en Madridquieren permanecer como son sin ser obligadas por nadie, fracasó.